Como una «piscina» describen sus habitantes a la comunidad San Miguel Arcángel de la parroquia La Cruz del municipio Maturín, por como se anegan las calles y hasta viviendas, cada vez que llueve debido a la falta de drenaje, cloacas y asfalto.
Diez años tiene esta pequeña comunidad conformada y aún tiene muchas carencias de servicios básicos y las fallas e interrupciones eléctricas.
«Todo esto cuando llueve es una piscina prácticamente. Hace falta drenaje y cloacas, no hay ni siquiera espacio para hacer pozo séptico, esto prácticamente era un callejón», expresa Jennifer Flores, habitante de esta comunidad.
Los problemas eléctricos es otro de los constantes problemas que enfrenta esta comunidad, por lo que sus habitantes temen por los daños a sus electrodomésticos.
«La luz va y viene, se va a las 6:00 de la mañana y llega como a las 2:00 de la tarde. Y es un problema porque se dañan los televisores, los ventiladores. Lo único que tengo es el televisor, los ventiladores y nada más» comentó, Jennifer Flores.
A raíz del problema con la intermitencia de luz en esta comunidad, se ve afectado también el servicio de agua, porque funciona con bomba eléctrica.
«El agua viene, se va. Pasamos casi una semana sin agua porque la bomba se había dañado por los problemas eléctricos», comentó María Torres, residente de la zona.
«El agua la arreglaron hace mucho con una bomba pero con el problema de la luz se volvió a ir y ayer fue que llegó pero sucia. Acabo de venir del hospital con mi hijo porque tiene asma, y esta agua no está apta para que los niños se la puedan tomar», destacó Flores.
Fotos: Osmel Rodríguez