Inmigrante ilegal fue declarado culpable por la violación y asesinato de Rachel Morin, una madre de cinco hijos de Maryland, Estados Unidos.
El agresor quedó identificado como Víctor Martínez Hernández, de 24 años de edad, condenado por asesinato en primer grado, violación en primer grado, delito sexual en primer grado y secuestro, informó New York Post.
La víctima, de 37 años de edad, fue asesinada en una carretera al noreste de Baltimore en agosto de 2023. Martínez Hernández podría pasar el resto de su vida en prisión.
La fiscal estatal del condado de Harford, Alison Healey, dijo que buscará la sentencia máxima para el acusado.
“Este caso sacudió a nuestra comunidad del condado de Harford y privó a una familia de su hija, hermana, madre y amiga”, dijo la funcionaria.
Asimismo, detalló que el ADN recuperado del cuerpo de Morin coincidía con el de Martínez Hernández. «La rapidez del veredicto habla de la solidez de las pruebas en el caso», añadió.
Healey informó que Morin “luchó por su vida” durante el violento episodio. “Fue brutalmente golpeada, violada y finalmente asesinada”, añadió la fiscal.
Martínez Hernández fue capturado en Tulsa, Oklahoma, en junio de 2024 luego de una persecución a nivel nacional. Su juicio comenzó a principios de este mes.
Morin se encontraba en el sendero Ma and Pa en Bel Air cuando el sospechoso la arrastró hasta el bosque y la atacó. Su cuerpo, gravemente golpeado, se localizó posteriormente en una alcantarilla.
El asesino, vivía ilegalmente en Estados Unidos desde febrero de 2023, dijo la policía.
Martínez había sido acusado anteriormente por una violenta invasión a una vivienda en Los Ángeles. Presuntamente, cometió varios crímenes atroces en meses previos al brutal asesinato de la joven madre.
El sheriff del condado de Harford, Jeffrey Gahler, dijo que “este monstruo” merecía la pena de muerte, pero los legisladores estatales prohibieron las ejecuciones.
El caso de Morin es uno de varios asesinatos de alto perfil en los que inmigrantes ilegales fueron condenados por el delito o se enfrentarán a juicio.
En otro caso, la estudiante universitaria de Georgia Laken Riley fue asesinada por un inmigrante ilegal venezolano, quien fue declarado culpable de su asesinato el año pasado.
De igual manera, dos inmigrantes enfrentan cargos por presuntamente matar a Jocelyn Nungaray, una niña de 12 años de Houston.
Vía 2001
