Un grupo de aproximadamente 60 comerciantes de la calle Chimborazo en Maturín denunciaron que llevan alrededor de 21 días sin el servicio de electricidad de 220 voltios, una situación que ha provocado la pérdida de mercancía y una drástica disminución en sus ventas.
Los afectados han hecho reiterados llamados a la empresa eléctrica Corpoelec, señalando que los transformadores que suministran energía de 220 voltios están quemados, pero hasta el momento no se ha resuelto el problema.
“Los transformadores de 220 voltios están inoperativos, y toda la calle se encuentra a oscuras debido a esta grave crisis energética. Además, los transformadores que proporcionan electricidad de 110 voltios también están en riesgo de quemarse”, expresó Juan Flores.
Además, agregaron que trabajadores de Corpoelec acudieron al lugar para tratar de reparar la situación, pero les ha costado y recalcaron a los comerciantes que deben esperar porque es necesario reemplazar los transformadores dañados.
“En esta calle hay negocios de barbería, restaurantes, tiendas de ropa, supermercados y heladerías que se ven gravemente afectados por estas fallas eléctricas, ya que dependen de refrigeradores para mantener sus productos. Hacemos un llamado urgente a las autoridades para que se tomen medidas y se resuelva esta situación”, dijo Flores.
Los comerciantes resaltan que las pérdidas son significativas tanto en mercancía como en clientes; aquellos dedicados a la venta de alimentos y helados enfrentan el deterioro de sus productos. A pesar de las adversidades, siguen operando con sus puertas abiertas, aunque resulta incómodo.
Además, enfatizan que han estado lidiando con esta problemática durante más de dos meses y han solicitado a Corpoelec una solución. Sin embargo, fue hace 22 días cuando comenzaron a experimentar la falla del suministro eléctrico de 220 voltios.
Fotos/Juan Carlos Goitía
