El Gobierno de Venezuela expresó su rechazo categórico a la decisión de la Comisión Europea de incluir al país sudamericano en una lista de jurisdicciones con «alto riesgo» en materia de blanqueo de capitales y financiamiento del terrorismo.
A través de un comunicado oficial, la administración de Nicolás Maduro calificó la medida como “ridícula” y aseguró que el verdadero riesgo radica en la “incapacidad” de la Unión Europea para proteger sus propios intereses económicos y políticos.
Venezuela rechaza de manera categórica su inclusión en la ridícula lista de países de ‘alto riesgo’ publicada por la Unión Europea”, afirmó el Ejecutivo, al tiempo que acusó al bloque europeo de actuar con una “burocracia anacrónica, envejecida y desconectada de su gente”.
El pronunciamiento también cuestionó la integridad del sistema financiero europeo, señalando la existencia de bancos involucrados en lavado de dinero, funcionarios que ignoran estas prácticas y paraísos fiscales que operan impunemente dentro del propio continente.
Asimismo, Caracas defendió la situación interna del país, asegurando que Venezuela cuenta con una economía en crecimiento, estabilidad política e instituciones al servicio del pueblo, “no de intereses financieros ni de lobbies”.
“El problema no es el riesgo, sino la verdad: que hay países del sur que ya no agachan la cabeza ni aceptan tutelajes”, concluyó el comunicado.
La lista publicada por la Comisión Europea incluye a territorios cuyas normativas presentan deficiencias en la lucha contra el lavado de activos y la financiación del terrorismo. Aunque no conlleva sanciones automáticas, obliga a las entidades financieras europeas a aplicar medidas de vigilancia reforzada en sus relaciones con actores de las jurisdicciones señaladas.
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