
Partir o triturar pastillas, medicamentos o hacer cualquier modificación de su forma habitual es algo muy común.
Aunque muchos no lo crean, deben tener en cuenta que esto no es lo más recomendable, ya que no solo ocasiona reacciones adversas, sino que el fármaco no funciona de la misma manera.
De acuerdo con la Agencia Española de Medicamento y Productos Sanitarios (Aemps), hay riesgos por esta práctica que solo debe realizarse con el visto bueno de un profesional sanitario o un farmacéutico.
“La manipulación de formas farmacéuticas orales sólidas, como comprimidos o pastillas, puede influir negativamente en su eficacia terapéutica y ocasionar reacciones adversas, tanto a los pacientes como a quienes manipulan los fármacos”, explicó Aemps.
De acuerdo con la entidad, las personas no deben manipular los medicamentos, y su consumo debe seguir las indicaciones de la orden médica, para así evitar posibles afectaciones.
“Este tipo de modificaciones puede tener un mayor impacto en las formas farmacéuticas de liberación modificada. Por ejemplo, liberación retardada, como las gastrorresistentes o de liberación prolongada, los comprimidos sublinguales (ya que no se deben tragar) y los medicamentos de estrecho margen terapéutico. Por lo tanto, la norma general debe ser la siguiente: no se deben manipular los medicamentos”, argumentó.
Pastillas trituradas bajo supervisión

La entidad explicó que la vía oral es una de las preferidas debido a la aceptación de la mayoría de los pacientes.
Sin embargo, en ocasiones específicas y bajo supervisión clínica, las pastillas se pueden triturar o partir, siempre y cuando estén formuladas por un especialista.
Vía El Nacional