Alrededor de 28 comercios ubicados en la calle Chimborazo, en Maturín, llevan una semana sin electricidad de 220 voltios (220 V) tras la explosión de un transformador. Esta situación les está generando pérdidas de clientes y mercancía.
Señalan que han hecho varios llamados a la empresa eléctrica nacional, pero solo asistieron el día de la explosión y únicamente restablecieron la luz de 110 voltios (110 V).




Sin embargo, recalcan que ellos siguen pagando el servicio eléctrico y merecen que este sea digno.
“Este transformador, según Corpoelec, lo habían acomodado hace tres meses, ya que se había averiado. Ahora se volvió a dañar. Nosotros siempre pagamos nuestras facturas de luz, siempre nos mantenemos al día. Queremos una respuesta a este problema, ya que estamos gravemente afectados”.






Uno de los afectados señaló que justamente va a inaugurar un restaurante y ya ha sufrido pérdidas de mercancía. Además, agregó que, como no puede encender los aires de sus otros negocios, también reporta pérdida de clientes.
Otros negocios que también son gravemente perjudicados son las heladerías y ventas de chicha, pues añaden que el calor que hay actualmente es tan sofocante que los clientes evitan negocios que no cuentan con aires acondicionados.
Esto también provoca que los vendedores trabajen con incomodidad. “Ya estamos en los meses donde más podemos vender y ¿cómo es posible que ya hemos llamado varias veces a Corpoelec y ya van 10 días y aún seguimos afectados? Es el mismo transformador que nos cambiaron hace tres meses y ahora tenemos otra vez una semana sin servicio”, dijo Virginia Velásquez.
En la zona hay negocios dedicados a la venta de comida, barberías, peluquerías, tiendas de ropa, agencias de lotería, entre otros comercios que están afectados por la falta del servicio eléctrico.
Los afectados, que también incluyen a los vecinos que residen en esta calle, piden solución a los organismos competentes, ya que los comerciantes trabajan con el sistema eléctrico.
Fotos/Juan Goitía