Los afectados son surtidos de forma interdiaria y solo con 40 litros
Choferes de la ruta 4, que trasladan pasajeros desde el centro de Maturín, hasta la parroquia Boquerón y viceversa, remolcan sus vehículos por varias calles para ahorrar gasolina, esto debido a lo difícil que se les ha hecho surtirse.
Oswaldo Morey, presidente de la Asociación de Transporte Hijos de Boquerón, expresó que los conductores de los autobuses, busetas y carros por puestos son surtidos de manera interdiaria, con una cantidad que varía de 40 a 20 litros, lo que los obliga a ahorrar el combustible con diferentes alternativas.
«Los choferes llegan al centro de Maturín y al dejar los pasajeros, apagan sus carros, desde varias calles los vienen remolcando hasta la parada, donde nuevamente esperan su turno de salida y lo encienden solo cuando están por salir», aseguró el entrevistado.
Agregó que como consecuencia de la poca cantidad que son surtidos los trabajadores del volante, su estadía en el cumplimiento de sus funciones se ha minimizado, por lo que solo dan cuatro vueltas diarias y en las tardes no tienen para seguir prestando sus servicios, por lo que a esa hora se hace difícil encontrar transporte disponible.