La jinete olímpica venezolana Patricia Ferrando se prepara para un desafío crucial este fin de semana en México. Junto a su caballo, ‘Honnaisseur’, la «amazona» criolla competirá en un concurso de adiestramiento clásico (Dressage) que le permitirá sumar puntos no solo para la Copa del Mundo, sino también para asegurar su cupo en los Juegos Olímpicos Los Ángeles 2026.
La experiencia de Ferrando en la equitación va más allá de la técnica; se enfoca en la profunda conexión emocional con su compañero equino.
“Alguna vez a través de mi respiración logré controlar la suya y su ritmo cardíaco; así es nuestra empatía”, confesó la deportista a Efe, destacando la singular relación con ‘Honnaisseur’, el equino con el que persigue la gloria olímpica.
La psicóloga de profesión utiliza su políglota para comunicarse con sus «hijos equinos»: hace los reclamos en español y los elogios en inglés, estableciendo una relación de entrega mutua.
Clasificatorio en México
El concurso se celebra en Santa Cruz Chiahuapan, a unos 55 kilómetros de Ciudad de México, iniciando este 8 de noviembre. Ferrando es una de las principales figuras latinoamericanas en la competencia, donde también destaca el campeón panamericano Julio Mendoza de Ecuador.
- Objetivo a corto plazo: Sumar la mayor cantidad de puntos posibles para clasificarse a la Copa del Mundo de Doma Clásica.
- Meta Olímpica: La clasificación a los Juegos Olímpicos Los Ángeles 2026.
- Rivalidad Internacional: Compite directamente contra jinetes provenientes de potencias mundiales del ecuestre como Alemania, Bélgica y Estados Unidos.
El Dressage
El ‘dressage’ o doma clásica, es una de las disciplinas olímpicas más estéticas, definida por la precisión y la armonía entre jinete y caballo. Ferrando, que inicialmente practicó saltos, se enamoró de esta disciplina por su exigencia técnica.
“El salto tiene una dificultad porque hay obstáculos a vencer; pero en la doma hay más técnica, necesitas el ‘feeling’ para poder hacerlo con el caballo. El adiestramiento es la precisión, la ejecución, la relajación, la fluidez y la armonía”, explica la jinete nacida en Caracas.
Es importante destacar que el ecuestre es el único deporte olímpico donde hombres y mujeres compiten en igualdad de condiciones, sin barreras de género, siendo el rendimiento el único factor decisivo.
Con información de Notitarde