
La comunidad venezolana en Chile se encuentra conmocionada tras un nuevo feminicidio que dejó como víctima a Maira Alejandra Pérez Dávila, madre de tres hijos y oriunda del municipio El Junquito, en Caracas. El hecho se registró en Castro, provincia de Chiloé, al sur de Chile.
La mujer de 45 años, fue atacada a puñaladas la madrugada de este martes 19 de noviembre, por su expareja, Aldryn Areny Osorio Bracamonte, también oriundo del Distrito Capital.
Durante la mañana de este martes se realizó la audiencia de control de la detención en contra del atacante, quien se habría enfrascado en una violenta discusión con Pérez Dávila al interior de un vehículo que circulaba por calle Galvarino Riveros, la que aumentó en intensidad cuando la mujer, presuntamente, fue objeto de diversas agresiones con arma blanca que la dejaron muy mal herida.
Los primeros antecedentes aseguran que la pareja era trasladada por otros dos venezolanos, y cuando el conductor se percató que la víctima había recibido varias estocadas, decidió trasladarse rápidamente al hospital local, pero chocó en el camino. Tras ello, solicitaron la ayuda de personal de Carabineros que estaba en labores de patrullaje por la zona, activándose el procedimiento de rigor.
Nada qué hacer
Voluntarios del Cuerpo de Bomberos de Castro acudieron al lugar y se encontraron con la víctima en muy malas condiciones al interior del automóvil.
La mujer presentaba una lesión compatible con una herida de tipo traumática penetrante de carácter grave en la zona del tórax, con sangrado profuso, y habría entrado en un shock hipovolémico severo producto de una lesión profunda, entrando en franco paro cardiorrespiratorio con muy pocas probabilidades de sobrevida, siendo trasladada hasta el Servicio de Urgencia Hospital Dr. Augusto Riffart de Castro, lugar donde se declaró su muerte.
De acuerdo con lo expuesto por la Fiscalía, el presunto autor fue identificado por la pareja venezolana que los trasladaba, por lo que funcionarios policiales procedieron a su búsqueda y fue localizado en la intersección de las calles Alcalde Tulio Alvarado con Padre Manuel Cárcamo, cerca de calle Galvarino Riveros.
El capitán Felipe San Martín, de la Segunda Comisaría de Carabineros Castro, detalló que el homicida se había escondido detrás de un contenedor de basura.
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