En un contundente mensaje ante miles de fieles congregados en la Plaza de San Pedro, el Papa León XIV lanzó una severa advertencia sobre la alarmante concentración de la riqueza a nivel global.
El pontífice denunció que los recursos del planeta se encuentran bajo el control de una minoría, mientras se ignora sistemáticamente el sufrimiento de los más vulnerables.
Una crítica a la injusticia económica
En el marco de la última audiencia jubilar del Año Santo 2025, el líder de la Iglesia Católica subrayó que la desigualdad se acentúa de forma injusta. Según el Papa, los poderosos «a menudo no quieren escuchar el gemido de la tierra y de los pobres».
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“Dios destinó todos los bienes de la creación para todos. La humanidad tiene el deber de generar, no de robar”, sentenció el pontífice peruano-estadounidense, poniendo el foco en la responsabilidad ética de quienes ostentan el poder económico.
La esperanza frente a la «prepotencia y maldad»
Más allá de la denuncia social, León XIV dedicó una parte fundamental de su discurso a la esperanza, eje central del jubileo iniciado por el Papa Francisco. El pontífice la definió como la «verdadera fuerza» capaz de contrarrestar el miedo agresivo y la violencia.
- Sobre la vida: “Sin esperanza estamos muertos; con esperanza, venimos a la luz”.
- Sobre el poder: “Lo que amenaza y mata no es fuerza: es prepotencia, es maldad que no genera nada”.
- Mensaje universal: En su saludo a los peregrinos de habla inglesa, reafirmó que la esperanza es superior a cualquier forma de violencia porque es generadora de vida.
Cierre de un ciclo histórico en el Vaticano
Esta audiencia marcó el fin de las celebraciones sabatinas que comenzaron en enero de este año. El evento estuvo cargado de simbolismo y cercanía; León XIV recorrió la plaza en el papamóvil, bendiciendo a niños y conversando con peregrinos de diversas nacionalidades.
Con este acto, el Papa transmitió un mensaje de continuidad, asegurando que, aunque las audiencias jubilares concluyan, el impulso de esperanza del Año Santo 2025 debe permanecer vivo en la acción diaria de la comunidad de creyentes.
Con información de Infobae