El 2025 llega a su fin consolidándose como uno de los periodos más prolíficos para la música global. Entre regresos muy esperados y propuestas vanguardistas, las plataformas digitales y la crítica especializada han coincidido en señalar un selecto grupo de producciones que no solo dominaron las listas de éxitos, sino que transformaron la cultura popular.
El reinado imparable de Bad Bunny
Benito Martínez abrió el año con “Debí tirar más fotos”, un proyecto que desde enero se instaló en la cima de Spotify. Con cinco Latin Grammy y seis nominaciones al Grammy anglosajón, el álbum ha sido aclamado por revistas como Rolling Stone.
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El impacto de este disco es tal que servirá de preámbulo para un hito histórico: Bad Bunny será el primer artista latino en encabezar el espectáculo de medio tiempo del Super Bowl.
Rosalía y la reinvención filosófica con “Lux”
La artista española Rosalía volvió a romper moldes con “Lux”. En este trabajo, la «Motomami» dio un giro radical al introducir conceptos de religión y filosofía en una mezcla sonora intensa e inclasificable.
Temas como “La perla” se han convertido en himnos generacionales, posicionando al álbum en el Top 5 de la crítica mundial y superando el éxito comercial de sus entregas anteriores.
Lady Gaga y el caos pop de “Mayhem”
El regreso de Lady Gaga al pop comercial con “Mayhem” (su octavo álbum de estudio) fue un fenómeno de masas. Su presentación en la playa de Copacabana en mayo reunió a más de 2 millones de personas, superando el récord histórico de Madonna.
Canciones como “Abracadabra” y la exitosa colaboración con Bruno Mars, “Die with a smile”, le han valido siete nominaciones al Grammy.
Joyas de autor y regresos memorables
Más allá de los grandes números, el 2025 ofreció propuestas de altísima calidad artística:
- Natalia Lafourcade: Con “Cancionera”, la mexicana celebró sus 40 años con un proceso de grabación analógico en una sola toma, logrando una pieza íntima y profundamente conectada con sus raíces.
- Pulp: La mítica banda de britpop regresó de la mano de Jarvis Cocker con “More”, un álbum que recuperó el sonido de los 90 y convenció unánimemente a la crítica.
- Dijon: Su segundo disco, lanzado por sorpresa, se convirtió en una obra de culto que mezcla gospel, pop y blues, consolidándolo como uno de los productores más innovadores del año.
De la catarsis personal al fenómeno K-Pop
El año también estuvo marcado por la honestidad brutal y las nuevas tendencias visuales. Lily Allen canalizó su divorcio del actor David Harbour en “West End Girl”, un álbum escrito en apenas 16 días que aborda temas de infidelidad y superación personal con una crudeza que cautivó al público británico.
Finalmente, el cine y la música asiática volvieron a converger con éxito en la película “Las guerreras del K-pop”.
El tema “Golden” se viralizó en plataformas digitales, elevando a las “K-pop demon hunters” como una de las agrupaciones más escuchadas y queridas del 2025.
Con información de Versión Final
