La Agencia de Energía Atómica de Japón (JAEA) informó sobre una fuga de agua contaminada con tritio en la central nuclear de Tsuruga, ubicada en la prefectura de Fukui. El incidente se registró en el reactor Fugen, actualmente en proceso de clausura y desmantelamiento, lo que generó preocupación en torno al manejo de residuos nucleares en el país asiático.
El reporte técnico indicó que el derrame ocurrió de manera accidental durante labores de mantenimiento, en un edificio auxiliar. Mientras se cortaban tuberías en la zona de equipos de prueba, se detectó la salida del líquido radiactivo, lo que activó de inmediato los protocolos de emergencia. Tres trabajadores presentes en el área debieron evacuar rápidamente tras la alarma de seguridad.
La institución aseguró que las mediciones iniciales no reflejan niveles de radiación alarmantes dentro ni fuera de la planta. Sin embargo, medios locales señalaron la posibilidad de exposición interna de los operarios debido al aumento de partículas de tritio en el aire, lo que mantiene la atención sobre las condiciones de seguridad laboral.
JAEA
La JAEA destacó que el material radiactivo quedó confinado en las instalaciones y que no se registraron filtraciones hacia el suelo ni hacia fuentes externas de agua. Aun así, se mantiene un monitoreo constante para descartar impactos en las zonas costeras de Fukui y garantizar que no exista afectación ambiental.
El reactor Fugen, protagonista del suceso, fue un prototipo de tecnología térmica avanzada que cesó operaciones en 2003. Su desmantelamiento, al igual que el de otras estructuras similares, ha representado un proceso complejo y prolongado, evidenciando los riesgos asociados a la gestión de instalaciones nucleares en retiro.
Mientras las autoridades buscan estabilizar la situación, organizaciones civiles insisten en mayor transparencia y en la protección de los trabajadores que enfrentan directamente las tareas de limpieza y control radiológico.
Vía VTV