En respuesta a la creciente crisis de orden público en Ecuador, Colombia refuerza sus medidas de seguridad en la frontera, con el objetivo de impedir el ingreso de criminales y grupos delictivos provenientes del país vecino.
El ministro de Defensa, expresó la disposición total del país para colaborar, afirmando: «Toda nuestra voluntad está en colaborar con las autoridades ecuatorianas en estos momentos difíciles».
Por su parte, el director encargado de la Policía Nacional, general Alejandro Zapata, anunció un aumento significativo de controles en puntos clave de la frontera, especialmente en el departamento de Nariño, incluyendo lugares como Ipiales, Mataje, Chiles, y Carlos Lama, este último identificado como un paso ilegal. El objetivo es evitar la entrada de líderes delictivos ecuatorianos, como el conocido como Fito, quienes se fugaron de las cárceles en Ecuador.
Iván Velásquez, destacó la cooperación constante entre Colombia y Ecuador en materia de seguridad, señalando que el intercambio de información y acciones coordinadas con las autoridades ecuatorianas ha sido una práctica habitual en la lucha contra grupos al margen de la ley. «Toda nuestra disposición está al servicio de la colaboración con las autoridades ecuatorianas», afirmó.
El comandante de las Fuerzas Militares, general Helder Fernán Giraldo, subrayó la importancia del trabajo de inteligencia permanente para desmantelar redes criminales vinculadas al narcotráfico en la frontera. Destacó los «ejercicios y compromisos» entre las Fuerzas Armadas de ambos países, enfocados en la interoperabilidad y el intercambio de información e inteligencia para contrarrestar amenazas transnacionales.
El gobierno colombiano, a través de la Cancillería, expresó su respaldo inequívoco a la institucionalidad democrática y al Estado de Derecho en Ecuador. El presidente Gustavo Petro ratificó esta posición, manifestando solidaridad con los afectados por los recientes hechos de violencia en Ecuador.
Con información de El Nuevo Siglo.