Después de abandonar las filas de Voluntad Popular, más de 400 dirigentes sociales, se comprometieron a seguir luchando por la libertad y la democracia de Venezuela.
Silvia Allen, concejal del municipio Maturín, explicó que desde la Dirección Nacional se tomaron decisiones que vulneraron los derechos políticos de la dirigencia.
Sin estar ajustadas a principios éticos ni a los estatutos del partido.
La dirigente señaló que en los próximos días se anunciará la conformación de un nuevo movimiento que se dedicará a trabajar por la democracia y la libertad de Venezuela.
“Nuestro compromiso sigue vigente, sigue activo y por ello seguimos en la calle. No nos estamos rindiendo contra la dictadura, seguimos avanzando con pasos firmes en la organización de los ciudadanos libertarios para obtener la victoria en los comicios del 2024”, concluyó Allen.
Destacó la dirigente, que «no se logró conciliar un proceso de igualdad con la Dirección Nacional del partido, lo que llevó a la renuncia de este número de dirigentes. Los motivos principalmente fueron éticos. En mi caso, no estuve en el equipo del partido que fueron suspendidos o expulsados”, explicó Allen.
Añadió la edil, que una de las decisiones que impulsaron la renuncia de los dirigentes fue la expulsión de Leonardo Padilla y la salida de la coordinación política de Zait Marchan. También, las sanciones contra Alejandro González y al diputado Luis Machado.
“Al ver cómo se llevaron estos procesos de sanciones, nos dimos cuenta de que no hay diferencia con el PSUV así no vale la pena estar acá”, apuntó.