El pasado sábado 27 de enero, dos antisociales ingresaron al ambulatorio de Sabana Grande en la parroquia Las Cocuizas, donde agredieron sexualmente a una de las doctoras, esto ha generado que los vecinos se sientan desprotegidos en materia de seguridad.
María Blanco, vecina del centro de salud, destacó que esta situación es muy angustiante, “es algo que nunca se había visto en el sector”.
“Tengo 40 años viviendo en la comunidad y nunca había ocurrido una cosa tan fea, como fue el ataque al ambulatorio, esto nos obliga a retomar el reclamo que tenemos sobre la activación del módulo policial”, indicó Blanco.
La entrevistada añadió que «en las adyacencias del ambulatorio, estaba un módulo policial que fue convertido en un colegio, allí podían funcionar las dos instituciones»,
Desde ese momento, las familias se comenzaron a sentir desprotegidas en el sector, indicó.
Explicó la vecina, que en la comunidad se aprecia bastante patrullaje, sin embargo, se requiere la presencia física de los funcionarios.
Blanco llegó al ambulatorio a fin de llevar a su hija a retirarse los puntos, pero no fue atendida ya que la instalación de salud no estaba abierta al público.
“Esperamos que esta lamentable situación no afecte la prestación del servicio en la comunidad, ya que el sector solo depende de este centro de salud” destacó.
SEGURIDAD PARA EL AMBULATORIO
Carmen Campos, comerciante ubicada en las inmediaciones del ambulatorio, destacó la necesidad que esta instalación cuente con seguridad.
“El ambulatorio siempre ha sido blanco de actos delictivos, lo que pasa es que nunca habían sido tan horrendo como lo que le paso a la doctora, por esta razón, uno no se siente seguro”, acotó.
Sobre la presencia policial, Campos, destacó que se requiere la presencia de funcionarios para sentirse cómodos, debido a que el patrullaje no brinda esa sensación.
La consultada destacó que es momento que en Sabana Grande se instalen puntos de control y la presencia de los organismos de seguridad sea permanente.