Benedetti detalló que dicho acuerdo se logró en una cena sostenida hace varios días con el jefe de Estado
En la tarde de este miércoles 14 de diciembre se conoció que el presidente Nicolás Maduro, autorizó a todas las aerolíneas venezolanas entrar en operaciones con Colombia.
Así lo dio a conocer el embajador en ese país, Armando Benedetti en diálogo con Caracol Radio.
Asimismo, el funcionario detalló que dicho acuerdo se logró en una cena sostenida hace varios días con Maduro, pues vale recordar que justamente ese país había puesto trabas para que se lograran dichas actividades aéreas con Colombia.
De igual forma, el funcionario del gobierno Petro señaló que con ese acuerdo se espera que aumenten los días y las frecuencias entre las dos naciones, pues actualmente solo está operando Turpial Airlines (desde el lunes 7 de noviembre) tras el anuncio entregado el pasado 26 de septiembre sobre el acuerdo entre Colombia y Venezuela para la reapertura de las fronteras aéreas.
Con este anuncio, serán tres las aerolíneas venezolanas que integren en sus itinerarios vuelos a Colombia y viceversa: Turpial, Conviasa, Laser y Avior. Ahora, con respecto a la colombina Satena, Benedetti le dijo al medio citado que ya cumple con las condiciones para que vuele hacia el vecino país, pues según él, desde el Gobierno nacional se ha hecho la inversión para que esas operatividades, al igual que los aviones, sean rentables; es decir, se compró una nueva flotilla de aeronaves.
Cabe mencionar que con las operaciones de Turpial y Satena, más compañías se interesaron en repetir ese modelo, como Wingo y Avianca. De hecho, el pasado 6 de diciembre se conoció que está muy cerca de que le den el aval para incorporar vuelos desde y hacia Venezuela.
Anteriormente, Avianca había mostrado sus reparos a la Aeronáutica Civil, cuya decisión estuvo basada en darle la prioridad a Satena (pese a que ya tenía el visto bueno en todos los aspectos técnicos) para operar desde y hacia el vecino país. Incluso, el CEO de Avianca, Adrián Neuhasser, había manifestado que la otra empresa, al ser pública, debía enfocarse en otros objetivos y dejar que las privadas le saquen el mayor provecho a esa reapertura económica.
Con información de El Universal