A su paso por la región de Filadelfia, l os remanentes de Debby dejaron lluvias, tormentas y al menos un tornado confirmado, que tocó tierra el jueves por la noche.
El tornado EF-1 llegó tras una advertencia de tornado en el condado de New Castle, Delaware, hasta las 7:30 de la noche del jueves.
Según el Servicio Meteorológico Nacional, el tornado confirmado se dio alrededor de las 7:10 de la noche del jueves en una tienda de comestibles en Marshallton. Tocó tierra cerca de la intersección de la Ruta 7 y Kirkwood Highway, varias millas al oeste de Wilmington.
El Servicio Meteorológico Nacional determinó el viernes que el EF-1 tenía vientos de 95 millas por hora, y recorrió 1.13 millas en Stanton, con un ancho estimado de 150 yardas. Derribó árboles y provocó daños en viviendas.
Un tornado EF-1 tiene velocidad del viento promedio de 100 millas por hora, lo que le permite arrancar árboles de raíz.
Lluvias, inundaciones y otras afectaciones
En tanto, en el condado de Burlington, Nueva Jersey, varios residentes fueron evacuados de sus hogares por las inundaciones. Allí, unas 75 personas quedaron atrapadas dentro de sus vehículos, y debieron ser rescatadas.
Respecto al condado de Chester, las lluvias torrenciales anegaron las carreteras. Allí, la Cruz Roja abrió un refugio para atender a más de 40 afectados.
Aunque la amenaza terminó, de acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional, hasta el final del viernes todavía persistían algunas lluvias y vientos fuertes. No obstante, ya no se emitió ninguna advertencia de tornado más.
Operaciones aéreas se vieron afectadas
Los restos de Debby habían puesto a Pensilvania, Nueva Jersey y Delaware bajo amenaza de tornado; en su desplazamiento hacia el noreste, el fenómeno llevaba fuertes lluvias y posibilidades de tormentas severas.
Las lluvias más fuertes cayeron principalmente al oeste de Pensilvania, en específico el oeste y noroeste de Filadelfia en los condados de Chester y Berks, así como el valle de Lehigh.
En el Aeropuerto Internacional de Filadelfia, al viernes se tenían contabilizados decenas de vuelos cancelados y al menos 400 demorados.
Se espera que, a medida que avancemos hacia el sábado, el mal tiempo se aleje por completo del área, para dejar un fin de semana mayormente seca.
Debby, que tocó tierra en Florida como huracán categoría 1 el lunes, este jueves se degradó a depresión tropical; el viernes ya era un ciclón postropical, de acuerdo con el Centro Nacional de Huracanes.
Al menos 8 personas han muerto a consecuencia del meteoro.
