Una impactante denuncia de negligencia ha desatado una intensa polémica en la localidad de Sun City, Arizona, poniendo en el ojo del huracán al centro geriátrico LifeStream. Angela Boorn relató que encontró a su tío, Gerald McClellan, de 75 años, fallecido y sentado en su silla de ruedas durante una visita.
Agentes del condado de Maricopa estimaron que el deceso había ocurrido entre tres y cuatro días antes, sin que el personal del centro lo notara.
El trágico hallazgo
El jueves pasado, Angela Boorn acudió a visitar a su tío Gerald McClellan en el centro LifeStream, descrito como un «centro de vida independiente para ancianos».
En lugar de encontrar a su familiar con vida, lo halló en una escena que describió como impactante al canal local KPHO: «Parecía un esqueleto en una silla. La cara y los ojos estaban hundidos”.
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La mujer, quien pagaba cerca de $1,700 dólares mensuales por la supuesta excelencia del servicio, confesó sentirse en shock y culpable por haber confiado en la institución. McClellan se había mudado al geriátrico en enero tras la muerte de su esposa.
“Le prometí a mi tía que lo cuidaría cuando falleciera”, comentó Boorn con profunda tristeza.
El protocolo que falló
La indignación de la familia se centra en el aparente incumplimiento de los protocolos de seguridad del ancianato. Según Boorn, al ingresar, le explicaron que todos los residentes debían pulsar un botón cada mañana para confirmar su bienestar.
“Todos los días, a las 10 a.m., se suponía que un miembro del personal debía contactarlo o ir a ver cómo estaba”, recordó la sobrina, enfatizando la total omisión de esta rutina en el caso de su tío.
En su desesperación, Boorn corrió a la recepción y preguntó al personal sobre la última vez que habían revisado a su familiar. La revelación de que nadie había notado el deceso durante días ha generado un fuerte debate sobre el cuidado y la supervisión que reciben los adultos mayores en este tipo de instalaciones.
Boorn sentenció con una advertencia: “Nadie debería tener que ver eso. Quienes tengan familiares allí, cuídense de su familiar, porque claramente [en LifeStream] no lo están haciendo”.
Respuesta oficial del ancianato
En respuesta a la grave situación, el centro LifeStream at Sun City emitió un comunicado oficial expresando su consternación por lo ocurrido:
«LifeStream at Sun City está profundamente entristecido por el fallecimiento de uno de nuestros residentes. Nuestras más sinceras condolencias y oraciones están con su familia y seres queridos en estos momentos difíciles”, se lee en la misiva.
El geriátrico concluyó su mensaje extendiendo su “sincera gratitud al personal de emergencias por su compasión, profesionalismo y apoyo”, sin ofrecer una explicación inmediata sobre el fallo en los protocolos de supervisión que condujo a la trágica situación.
Con información de Caraota digital
