El asfaltado prevalece como la prioridad dentro de las comunidades, al igual que el alumbrado público
Entre charcos y a oscuras habitan los habitantes del sector Brisas de Sarrapial, parroquia Boquerón municipio Maturín.
Señalan que tienen más de seis años sin que le hagan un «cariñito» a la comunidad, por lo que piden a las autoridades mayor atención con estas dos problemáticas que los agobia.
Esta comunidad cuenta con más de 100 familias y los más afectados son los niños a la hora de salir para la escuela, ya que las carreteras son de tierra y cuando llueven se vuelven charcos.
La señora Maribel Lara, residente desde hace 40 años, manifestó que la comunidad cuenta con una calle principal y cuatro adyacentes que son de tierras, dijo que además no tienen alumbrado público.
«No entendemos por qué, estando al lado de varias instituciones del estado, estemos tan desasistidos. Urge que asfalten, coloquen luminarias y los cuerpos de seguridad realicen recorridos para evitar que la delincuencia haga de las suyas», expresó.
Del mismo modo, el vecino Ronald Córdova, habitante del sector desde hace 12 años, dijo que el peligro es de noche por lo oscuro que queda la comunidad lo que da cabida para la delincuencia.
«Le pedimos a las autoridades que se aboquen al sector para que evalúen las problemáticas y den respuestas de las mismas», enfatizó.
Asimismo Nachy Blanco también vecina desde hace 12 años, aseveró en la importancia de que se asfalte para que los niños puedan ir a la escuela sin estar saltando por la tierra, que cuando llueve es un río de lodo.
