Choferes de los carritos que operan desde el Terminal Interurbano de Maturín hacia los estados Sucre, Bolívar, Anzoátegui y Delta Amacuro, denuncian el mal estado de las vías hacia estas regiones, lo que no solo dificulta su trabajo, sino que también pone en riesgo la seguridad de los pasajeros en cada viaje.
En este sentido, los conductores también señalaron que la carretera al oeste del estado Monagas, que atraviesa el sector La Ceiba hasta Anaco, está completamente cubierta por la maleza.
Asimismo, la vía que se dirige al sur hasta El Silencio, en el municipio Libertador, presenta un estado de deterioro alarmante.
«Hay dos carreteras que están totalmente intransitables, la que va de Temblador a Tucupita y la que conecta San Antonio de Capayacuar con Cumanacoa. Están llenas de huecos y piedras; hay tramos sin asfalto y cubiertos de monte, lo que hace imposible transitar por ambos canales», comentó un chofer que prefirió permanecer en el anonimato.
Además, destacó que en San Antonio durante la temporada de lluvias, el río que pasa cerca de la carretera se desborda y cubre la vía, obligándolos a cruzar por encima del agua para continuar su camino.
Daños significativos en los vehículos
También mencionó que las malas condiciones de las carreteras han impactado significativamente sus finanzas debido a los constantes daños en sus vehículos.
«En solo dos viajes a esos destinos, el carro se desajusta. Si se rompe un amortiguador, se pierde completamente el viaje porque repararlo cuesta mínimo 100 dólares, equivalente a más de tres mil bolívares. Y si se daña un caucho, el costo oscila entre 30 y 80 dólares, dependiendo del tipo», añadió el chofer.
20 % de afluencia de pasajeros
Por otro lado, aunque estamos en plena temporada vacacional, la afluencia de pasajeros ha disminuido a alrededor del 20 %. La mayoría viaja por motivos laborales o situaciones personales en lugar de hacerlo por placer.
«Ahora la gente viaja, principalmente, por trabajo o por alguna urgencia; ya no es como antes cuando se viajaba para vacacionar. Esto puede deberse a la situación del país. Además, aunque tratamos de salir del Terminal con todos los asientos ocupados, normalmente regresamos vacíos o con solo un pasajero», afirmó el profesional del volante.
Fotos/Osmel Rodríguez
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