
En un recorrido por las principales avenidas de acceso de Maturín, como la Av. Libertador y la perimetral de Las Brisas del Aeropuerto, pudimos constatar que pese a todo pronóstico, los comerciantes mantienen sus negocios abiertos apostando por la economía local, pese a que aseguran que las ventas han caído en casi 50 %, en comparación con años anteriores.

Luis Rojas, encargado de un puesto de comida en la perimetral de Las Brisas del Aeropuerto, destacó que la constancia ha sido clave para mantener su venta de cachapa casera tradicional, un plato típico venezolano, propio también de Monagas, incluso en estos tiempos difíciles.
«En comparación con años anteriores, las ventas han bajado un 50 %», expresó Rojas. «Lo que ganamos lo usamos para mantener al personal. Antes, un lunes, que se consideraba un día malo, raspaba tres mil mazorcas; ahora, sumando de lunes a viernes, solo raspamos de cuatro mil a cinco mil. Es una diferencia muy grande. Diariamente vendía un cochino, ahora con eso vendo toda la semana. Ha sido un golpe duro», alegó.

Por su parte, Yanira Martínez, vendedora de empanadas en el paseo Libertador, señaló que hay días en Por su parte, Yanira Martínez, vendedora de empanadas en el paseo Libertador, señaló que hay días en los que no obtienen ganancias, y lo que generan apenas cubre el mantenimiento del puesto. No obstante, aseguran que siguen trabajando duro para mejorar, manteniendo siempre la calidad de sus productos.
«Los fines de semana es cuando más tenemos ventas, pero en estos últimos días han bajado debido a que la mayoría de las personas están enfocadas en las compras de cierre de año escolar», afirmó Martínez.
«Nos tocó aumentar el precio de las empanadas, ya que el dólar y los artículos no han parado de subir. Si antes vendíamos cuatro paquetes, ahora vendemos dos, pero con mucho esfuerzo seguimos luchando para comprar la comida y subsistir», dijo.

