Este Día de los Muertos, los dos principales cementerios de Maturín, el nuevo y el viejo, estuvieron bien concurridos de personas que aprovecharon de visitar a sus familiares ya fallecidos.
Los ciudadanos manifestaron que en ambos camposantos se observó el mantenimiento reciente que recibieron, aunque algunos señalaron que hubo zonas donde el trabajo no se hizo completo.
Manuela de Brito quien acudió al cementerio viejo, expresó que hacia la parte más distante aún se podía observar monte alrededor de las tumbas, por lo que a su juicio hizo falta mayor mantenimiento.
«En la parte más alejada es donde hay más monte. La semana pasada vine y estama muy enmontado, creo que deberían hacer el trabajo completo porque parece que limpian por donde pasa la reina nada más, es decir, ponen pañitos de agua tibia», señaló de Brito.
Por su parte, Bertha Chacón indicó que el cementerio nuevo lo vio «muy bonito y limpio», aunque ha visto como muchas tumbas le han quitados accesorios como argollas, tubos y hasta floreros.
De igual forma, Nieves Mota manifestó que consiguió la tumba de sus padres con la tapa movida y sin las argollas y una capillita que le habían mandado a construir. En este sentido, pidió mayor seguridad para que no ocurran este tipo de hechos.
