DestacadasEspecialGastronomía

¿Cuál es el origen del tradicional Pan de Jamón?

La celebración de la Navidad, conmemorando el nacimiento del Niño Jesús, era una época donde las familias venezolanas buscaban olvidar las penurias del año y disfrutar de una comida abundante y deliciosa.

El Pan de Jamón es una creación venezolana con más de un siglo de tradición, que además de ser una delicia gastronómica con sello nacional, es un producto que caracteriza a la cultura y la identidad de Venezuela y se consume como desayuno, acompañante en el almuerzo durante la época decembrina y en la cena de Navidad. E incluso, desde meses tan tempranos como octubre.

El pan relleno de jamón, aceitunas, pasas y otros ingredientes, ha sido producto de una evolución desde 1905, cuando una panadería de Caracas decidió aprovechar sobras de jamón y embutirlas en una masa enriquecida, que resultó ser una idea genial para el paladar de los clientes de aquella ciudad de comienzos del Siglo XX.

La historia documentada indica que, en diciembre de 1905, un propietario de origen extranjero de una panadería en el casco central de Caracas, se le ocurrió la idea de quitar las sobras de jamón que estaban desaprovechadas en el hueso del llamado «Jamón de coleto«, un pernil trasero de cerdo cocido, pasado por salmuera y cocinado en caldo, picarlas convenientemente y utilizarlas para rellenar el pan.

La rápida aceptación del producto llevó al “Pan con Jamón”, como se le llamó inicialmente, a ser considerada una especialidad de la panadería, que fue copiada de inmediato por otras y cada panadero se encargó de experimentar por su cuenta al agregarle otros ingredientes a su gusto y criterio.

En un anuncio del periódico El Constitucional del 21 de diciembre de 1906, se publicó una publicidad que vendía el «Pan con Jamón«. No obstante, al año siguiente, la nomenclatura cambió a «Pan de Jamón», término que finalmente se popularizó y quedó como nombre definitivo del producto.

Investigación

Rafael Cartay, fue el autor de una de las investigaciones alimentarias en Venezuela que permitió ratificar el origen venezolano de esta joya de la cocina criolla, señalan diversos sitios especializados sobre la gastronomía nacional.

Publicó en 1986 el libro “Pan de Jamón”, donde reveló los orígenes, variaciones y la significación cultural de esta delicia. Su investigación se considera un punto de referencia fundamental para entender la evolución y la importancia del Pan de Jamón en la cultura venezolana y confirmó que el pan fue creado por Lucas Manuel Ramella Martínez en la Panadería Ramella, ubicada en la esquina de Las Gradillas, en Caracas.

Desmintió así las creencias anteriores que atribuían su origen a tradiciones europeas o coloniales y confirmó que es una creación netamente venezolana.

Austeridad

A comienzos del siglo XX, Venezuela era un país austero y endeudado, con una capital, Caracas, pequeña y relativamente poco desarrollada. Sin embargo, la celebración de la Navidad, conmemorando el nacimiento del Niño Jesús, era una época donde las familias venezolanas buscaban olvidar las penurias del año y disfrutar de una comida abundante y deliciosa, según lo permitieran los ingresos.

Gracias al petróleo, durante las primeras décadas del siglo XX la economía de Venezuela experimentó un cambio significativo y la mejoría económica permitió a más familias disfrutar de manjares que antes eran considerados un lujo.

El Pan de Jamón se consolidó como un plato esencial durante las celebraciones navideñas venezolanas a mediados del siglo XX. Para 1950, ya era un acompañamiento indispensable de otros manjares navideños como las hallacas, el pernil horneado y la ensalada de gallina.

Sensaciones, emociones, sentimientos:

La combinación de sabores y aromas que ofrece—con el contraste entre lo salado del jamón y lo dulce de las pasas—satisface plenamente el paladar y evoca emociones y sentimientos festivos. El aroma del Pan de Jamón recién horneado inundando el hogar es una experiencia sensorial que muchos venezolanos y venezolanas de todas las edades asocian con la Navidad.

El Pan de Jamón se consolidó como un símbolo de las festividades navideñas, representando la unidad e identificación nacional. Las panaderías comenzaron a ofrecer una mayor variedad de productos, y el Pan de Jamón se destacó como una delicia que todos esperaban en la temporada navideña y finales del año, incluso comenzando desde octubre hasta la Noche Vieja, y un poco más allá, en los días de enero de cada Año Nuevo.

Esta evolución a lo largo de más de un siglo, consolida al Pan de jamón venezolano como un símbolo gastronómico y cultural durante las festividades navideñas y en cualquier época del año. Es un deleite para el paladar, pero también representa la unión familiar, la identidad nacional y la cultura de una nación orgullosa de sus tradiciones.

Vía VTV

Noelis Idrogo

Licenciada en Comunicación Social

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Back to top button

Acceder

Registro

Restablecer la contraseña

Por favor, introduce tu nombre de usuario o dirección de correo electrónico y recibirás por correo electrónico un enlace para crear una nueva contraseña.