
A sus 22 años, recién llegado a Miami, sin empleo y viviendo en casa de una tía, Danny Ocean escribió ‘Me Rehúso’, la pegajosa canción que lo dio a conocer internacionalmente; según contó en una entrevista con Érika de la Vega, la canción fue un regalo de San Valentín para una persona especial que había quedado en Venezuela.
Más allá del romance, el tema encapsula el dolor de separarse por causas ajenas a la voluntad, el anhelo del reencuentro y la esperanza de volverse a ver.

De un trabajo perdido al inicio de una carrera
En aquel momento, Ocean atravesaba un momento crucial de su vida, lo habían despedido de una tienda de maletas y estaba por terminar el plazo de estadía en casa del familiar que lo recibió. Fue entonces cuando decidió escribirle a Juan Pablo Galaviz, un contacto que tenía desde hace tiempo, pero no se había atrevido a escribir.
Fue entonces cuando le presentó la canción a Galaviz quien se convirtió en su primer mánager, pero el golpe de suerte llegó cuando la presentadora Osmariel Villalobos, oye el tema y publica un fragmento de la canción en su Instagram cantando, cuando aquel video que apenas tenía 400 reproducciones en YouTube alcanzó más de 11.000 en poco tiempo, antes de ser relanzado oficialmente en 2016.
El ascenso inesperado
Sin video oficial y solo con un arte visual, Me Rehúso empezó a circular por correo electrónico y redes. Primero sonó en discotecas de Venezuela, luego en República Dominicana, Panamá, Nicaragua, Honduras y Colombia, pero el verdadero cambio llegó al conquistar México, país al que Danny Ocean guarda un cariño especial porque fue ahí donde la canción alcanzó su mayor éxito.
Entre la fama y la realidad
En plena explosión de la canción, Ocean aún trabajaba en una pizzería, limpiando baños y atendiendo mesas, mientras recibía ofertas tentadoras. “Confié en Juan”, recordó. El artista admitió que en ese tiempo no estaba listo para la exposición pública y que debió aprender gradualmente a manejar el negocio y la industria musical.
Vía Diario 2001