El presidente de Bolivia, Luis Arce, se encontró cara a cara con el excomandante Juan José Zúñiga en las puertas del Palacio Presidencial. Allí, el mandatario le pidió que repliegue las fuerzas militares, en el marco del intento de golpe de Estado.
Zúñiga se negó al pedido, generando un clima aún mayor de tensión en el país boliviano, donde el Ejército ingresó por la tarde al Palacio Quemado, sede del Gobierno.
»Repliegue todas las fuerzas militares», demandó Arce, ante un Zúñiga que, luego de la negativa, mantuvo silencio ante las preguntas de los periodistas sobre cómo iba a continuar la situación, generando un clima de incertidumbre que no para de crecer.
Luis Arce habló junto a su gabinete en cadena nacional. «Necesitamos que el pueblo boliviano se movilice en contra del golpe de Estado», dijo rodeado de su equipo de gestión.
A través de una transmisión en vivo por Facebook, el presidente boliviano denunció: «El país hoy está enfrentando un golpe de Estado. El país enfrenta una vez más intereses para que la democracia en Bolivia se trunquen».
«Aquí está el Gobierno con todos sus ministros firmes aquí en Casa Grande para frenar cualquier intento golpista, todo intento que atente a nuestra democracia», insistió el mandatario.
Así, Arce llamó al pueblo a movilizarse y agregó: «No podemos permitir una vez más que intentonas golpistas se lleven vidas bolivianas», a la vez que ratificó la firmeza del gabinete.
«¡Qué viva el pueblo boliviano!», cerró su discurso el presidente.
Cortesía Globovisión