Shein, la reconocida empresa de moda con origen en China, ha presentado de manera confidencial su solicitud para salir a bolsa en Estados Unidos, según informó The Wall Street Journal el lunes. Fuentes familiarizadas con el asunto revelaron que la compañía ha contratado a las prestigiosas firmas financieras Goldman Sachs, JPMorgan Chase y Morgan Stanley para llevar a cabo esta operación, que ha sido objeto de especulación en los últimos meses.
En su última ronda privada, Shein alcanzó una valoración de alrededor de 66.000 millones de dólares (60.200 millones de euros) y se espera que busque una cifra aún más alta para su debut en Wall Street.
Fundada en China en 2008 y posteriormente trasladada a Singapur, Shein ha ganado gran popularidad entre las generaciones más jóvenes, consolidándose como una de las principales empresas de moda a nivel mundial. En el año 2022, registró beneficios por valor de 800 millones de dólares y una facturación de 23.000 millones.
La empresa, especializada en comercio electrónico con la excepción de tiendas físicas efímeras o «pop-up stores», ha logrado una significativa presencia internacional, siendo Estados Unidos su mercado principal seguido por Europa.
A pesar de su éxito, Shein ha enfrentado críticas por su modelo de negocio de «moda rápida» y consumismo, basado en la producción masiva de prendas con rotación rápida y precios muy bajos, lo que ha generado preocupaciones sobre su impacto ambiental.
El Wall Street Journal informa que las autoridades estadounidenses han condicionado la salida a bolsa de Shein a una investigación de su cadena de suministro. Esta medida busca determinar si la empresa obtiene algodón de la región de Xinjiang, la cual ha sido sancionada por Washington debido al presunto uso de trabajo forzoso de la etnia uigur.
En un movimiento estratégico este año, Shein cerró un acuerdo con el grupo estadounidense SPARC, propietario de Forever 21 y otras tiendas de ropa, para expandir su presencia en el mercado minorista de Estados Unidos e Internet. Además, adquirió la marca británica Missguided. Estos movimientos estratégicos posicionan a Shein como una fuerza clave en la industria de la moda global, preparándose para su próximo paso en el mercado bursátil estadounidense.
Con información de El Debate.