Este domingo 30 de junio, se dio las elecciones internas en Uruguay para definir los candidatos presidenciales para los comicios del 27 de octubre. Este sufragio batió un récord al contar con solo el 35% de los votantes, representado una clara apatía en este evento electoral.
En este sentido, el porcentaje de participación ciudadana en las elecciones internas de Uruguay fue menor a la anterior cifra récord establecida en el año 2014. En aquel entonces fue de un 37%.
Ante esto, el presidente Luis Lacalle Pou reconoció la necesidad de revisar el sistema actual, algo en lo que coincidió de su lado el exmandatario José Mujica, el primero en votar en su colegio al filo de las 08:00 a.m., hora local.
Por otro lado, se comenta que la incidencia del frío, el inicio de las llamadas vacaciones julianas, la apatía ciudadana y el fútbol, fueron algunos de los factores que menguaron la participación ciudadana a estas elecciones internas.
La izquierda opositora gana terreno
Los sondeos muestran un enfriamiento de la coalición de centro-derecha del presidente Luis Lacalle Pou, debido a que su gabinete se vio sacudido por acusaciones de espionaje político y corrupción. Esto pese a que prometió luchar contra la delincuencia y el narcotráfico.
Esta situación ha permitido que la coalición de centro-izquierda, Frente Amplio, aventaje a los principales partidos, obteniendo un 47% de apoyo, 15 puntos por delante del Partido Nacional de Lacalle Pou, la principal fuerza dentro de la coalición gobernante.
El ganador de estas elecciones generales, previstas para el 27 de octubre, tendrá que reducir las elevadas tasas de homicidio, mejorar la red de seguridad social, equilibrar el comercio con su principal socio, China, y mantener en marcha una economía que se espera que crezca casi un 4% este año.
Vía Agencias.