En la Unidad Educativa Andrés Bello, en el sector Mangotín, del municipio Ezequiel Zamora, se forman monumentos naturales como El Salto Ángel, La Paila, entre otros, cada vez que llueve.
El concejal de la jurisdicción, Edgar Palacios, precisó que las canales de agua del techo están severamente deterioradas y el sistema de drenaje del plantel, no funciona.
Indica que en el colegio, donde reciben clases más de 50 jóvenes, las maestras deben ingeniárselas en cada aguacero, para reubicar a los niños a otras aulas.
Detalla que no solo se forman las enormes caídas de agua, sino que la misma corre por todos lados y llegan hasta la tableo eléctrico.
«No suspenden las clases, pero deben reubicar a los niños en otras secciones porque comienza a fallar la luz y algunas cosas se electrifican», apuntó.
Aseveró asimismo que «el Alcalde y las demás autoridades deben meterle la mano a esta institución. El colegio queda en un caserío y es casi imposible buscar otras alternativas de estudios fuera del pueblo, por la deficiencia del transporte».
Fotos: Cortesía