
Cuando de quemar calorías se trata, muchas son las recomendaciones que se pueden escuchar, como realizar una dieta, dormir a una determinada hora o hacer ejercicios.
Según los expertos, caminar, correr, levantar pesas, subir o bajar escaleras puede ser efectivo para quemar calorías. También puede ayudar el ejercicio sentado, por ejemplo, a través de estiramientos para mejorar la postura o sentarse en una pelota de equilibrio.
¿Se queman calorías sentado?
Contrario a lo que se cree, sí es posible quemar calorías sentado, pero para ello se deben realizar ejercicios, los cuales, además, ayudan a mantenerse saludable. La clave está en dedicar 30 segundos a cada movimiento.
¿Por qué se consigue? La rutina completa no durará más de dos minutos, pero pierdes peso y quemas calorías porque con estos ejercicios estimulan el metabolismo y cuidan la salud en general.
¡Manos a la obra!
Estos ejercicios que se pueden realizar sentados resultan ser prácticos y asequibles para todos. Por ejemplo, sentado en una posición recta, levanta las piernas, una a una, y mantenla en el aire durante algunos segundos; luego ambas a la vez. Este simple ejercicio ayuda a quemar calorías, mejora la flexibilidad de las articulaciones de la cadera, mejora la resistencia muscular y fortalece los músculos.
Otro ejercicio que puedes llevar a cabo sentado consiste en sentarse derecho en la silla y colocar una mano sobre la rodilla opuesta, y girar suavemente el torso. Se recomienda mantener la posición durante unos segundos. Con ello mejora la flexibilidad, tonifica los músculos abdominales, alivia la tensión de la espalda, favorece la digestión y se queman calorías.
También se puede sentar en el borde de la silla e inclinarse hacia atrás; se levantan los pies y pedalea tal y como si manejara bicicleta. Esta es una forma de realizar abdominales sentados que favorece no solo la pérdida de calorías, sino que, además, mejora la flexibilidad, la postura y el equilibrio, y fortalece los músculos.
Finalmente, y no menos importante, sentado derecho, se levanta una rodilla hacia el pecho y se sostiene con las manos; luego se cambia de pierna para un mejor entrenamiento, que beneficia la postura de la columna, alivia el dolor lumbar y, por supuesto, se queman calorías.
Vía Diario 2001