Desde el año 1990, se celebra en Venezuela el Día del Abrazo en Familia, el segundo domingo de noviembre, para «exaltar los valores de amor, respeto y fraternidad entre todos los miembros de un grupo familiar».
Es por ello, que en este sábado 16 de noviembre, las escuelas “Fe y Alegría” de Maturín realizaron diversas actividades en la que participaron alrededor de 400 estudiantes y más de 70 padres y representantes.
Durante este encuentro, los asistentes disfrutaron de bailoterapia, castillos inflables, cama elástica, juegos tradicionales y lotería; esta última en beneficio de los baños del plantel educativo que requieren de mejoras además de otros problemas como el daño que ocasionan las raíces de los árboles a esta institución.
Así lo indicó Elizabeth Millán, directora de la Escuela Técnica Padre Luis Antonio Ormieres, en La Murallita.
«Este colegio es grande y tenemos el problema de que las raíces de los árboles nos están dañando los pisos. Entonces, lanzamos esta lotería hoy a beneficio de esto, aprovechando el día de la asistencia de los padres y representantes».
Esta actividad se realiza cada año en todas las escuelas pertenecientes al movimiento católico Fe y Alegría del país y después de tantos años continúa esta tradición.
«Así celebramos nosotros como escuela católica, ya llevo 25 años con el Movimiento de Fe y Alegría, y son 25 años celebrando el Abrazo en Familia. Comencé con las monjitas, y ellas ya no están, pero estamos nosotros y seguimos esta costumbre de seguir afianzando nuestros lazos de amistad con los padres y representantes», enfatizó la directora Elizabeth Millán.
Este plantel cuenta con 972 estudiantes de los cuales asistieron al menos la mitad de ellos a esta actividad, además de los padres y representantes.
«Para nosotros este día representa la unión familiar, el amor, el compromiso, la lealtad, y ese amor que debemos tener incondicional hacia nuestros familiares, hoy compartimos con compañeros de trabajo, con mis alumnos que son como mis otros hijos», comentó Vanessa Marcano, docente de primer grado.
«Esta es una actividad para establecer la amistad, la fraternidad entre las familias y rescatar el concepto de familia como célula fundamental de la sociedad», comentó el profesor Manuel Jaimez, quien lleva más de 15 años impartiendo clases en este popular colegio, y quien compartió una sopa con vecinos, amigos, estudiantes y todos los presentes.
Fotos: Gissbelis Cortéz