Comerciantes, ciudadanos de a pie y transportistas que hacen vida en el casco central de Maturín, esperan que la avenida Bolívar sea priorizada dentro del Plan Cero Huecos, que fue iniciado recientemente por las autoridades gubernamentales.
Piden que se atienda lo más pronto posible el tramo que va desde la plaza Siete hasta la Gobernación del Estado Monagas, donde se puede apreciar el franco deterioro del pavimento, en especial en el carril derecho, sentido a la Juncal.
Los conductores de ruta que deben circular a diario por esta arteria vial comentaron que «a veces los huecos se llenan de agua, cada vez que llueve», y cuando caen en las mismas, «obligados a estar cerca de las paradas», bañan de charco a todos los que se encuentran cerca.
«Caer allí significa rogarle a Dios para que una pieza del carro no se dañe. La situación está complicada y tener que invertir cada 15 días o menos tiempo en las piezas del tren delante y amortiguadores, no rinde la base para hacerlo», comentó Carlos Ortiz, chofer.
Fotos: Osmel Rodríguez