
El rapero y empresario Sean “Diddy” Combs enfrenta un juicio por tráfico sexual y crimen organizado en un tribunal federal de Manhattan, donde los fiscales lo acusan de dirigir una red de explotación sexual que involucraba a mujeres sometidas a actos degradantes y abusos físicos. El juicio comenzó este lunes, y la fiscal Emily Johnson presentó impactantes testimonios que describen el supuesto comportamiento abusivo de Combs.
Acusaciones de abuso y violencia: el testimonio de Cassie
Entre los testigos clave se encuentra Cassandra Ventura, conocida artísticamente como Cassie, expareja de Combs y estrella de rhythm and blues. Según Johnson, Combs obligó a un scort (acompañante masculino) a orinar en la boca de Cassie durante una de las llamadas “Freak Offs”, fiestas sexuales organizadas por el acusado; Cassie relatará este incidente.
“Cassie contó que sintió que se estaba ahogando cuando Combs hizo que el acompañante orinara en su boca”, afirmó la fiscal.

En otro incidente descrito por la fiscalía, Combs supuestamente intentó localizar y asesinar a un hombre con quien Cassie estaba saliendo después de su separación. Al no encontrar al hombre, Combs habría dirigido su ira contra la cantante, golpeándola violentamente.
“Le dijo que si lo desafiaba nuevamente, haría públicos los videos de sus encuentros sexuales forzados”, señaló Johnson.
Según la acusación, es un patrón de abuso que se extendió por dos décadas involucró no solo a Cassie, sino a otras mujeres, entre ellas una víctima identificada como “Jane”; bajo amenazas y violencia, forzaron a estas mujeres a participar en actos sexuales. Estos episodios forman parte de ese patrón. El caso también involucra a miembros del círculo íntimo de Combs, a quienes se acusa de ayudar a encubrir sus crímenes.
Cassie, quien conoció a Combs en 2006 cuando tenía 19 años y él 36, también testificará sobre supuestas golpizas que sufrió a manos del rapero a lo largo de su relación. Combs, de 55 años, ha negado todos los cargos y se ha declarado no culpable.

El oscuro trasfondo de las “Freak Offs”
Los fiscales describieron las “Freak Offs” como orgías de varios días, donde Combs obligaba a mujeres a consumir drogas y participar en actos sexuales, que él frecuentemente grababa. Según la acusación, el artista utilizaba estos videos para chantajear a las víctimas y evitar que denunciaran los abusos.
“Escucharán testimonios de mujeres que describen algunos de los momentos más dolorosos de sus vidas”, afirmó Johnson. “Los días que pasaron en habitaciones de hotel, bajo los efectos de las drogas, vestidas con disfraces para cumplir las fantasías sexuales del acusado”.

La fiscalía alega que cuando las mujeres se resistían, Combs reaccionaba con violencia. En uno de los incidentes más graves, ocurrido en 2016, imágenes de seguridad de un hotel en Los Ángeles captaron al rapero pateando y arrastrando a una mujer que intentaba huir de una de estas fiestas. CNN transmitió ese video en 2024, provocando una disculpa pública por parte de Combs.
La defensa de Combs: relaciones consensuadas
En su declaración inicial, la abogada defensora Teny Geragos afirmó que el caso es una distorsión de las relaciones románticas de Combs, presentadas ahora como crimen organizado y tráfico sexual.
“Sean Combs es un hombre complicado, pero este no es un caso complicado. Se trata de elecciones voluntarias hechas por adultos capaces en relaciones consensuadas”, declaró Geragos.

La defensa planea cuestionar la credibilidad de las mujeres que testifican contra Combs, sugiriendo que están motivadas por dinero. Según Marc Agnifilo, abogado principal de Combs, muchas de las presuntas víctimas han presentado demandas civiles en busca de compensación económica; Combs resolvió fuera de los tribunales una demanda de Cassie por una cantidad no revelada.
“Pregúntense por qué están haciendo estas acusaciones ahora. ¿Cuál es su motivo? Para muchas de ellas, la respuesta es simple: dinero”, afirmó Geragos.
El juicio y las posibles consecuencias
Se espera que el juicio se extienda por aproximadamente dos meses; al menos tres mujeres, y posiblemente cuatro, testificarán que Combs las abusó. Además, antiguos empleados, que según los fiscales ayudaron a organizar y encubrir las actividades del rapero, también darán su testimonio.
Si declaran culpable a Combs de los cinco cargos de conspiración de crimen organizado, tráfico sexual y transporte para participar en prostitución, él enfrenta una pena mínima de 15 años de prisión, que podría extenderse a cadena perpetua.
Combs, quien se presentó en la corte acompañado de su madre Janice Combs y seis de sus hijos, se mostró sonriente y saludó a su familia antes de comenzar el juicio. A la salida de la corte para el receso del almuerzo, levantó el puño y sonrió a sus hijos, uno de los cuales le hizo un símbolo de corazón con las manos.
Vía Infobae