Alrededor de 13.000 extranjeros terminaron en las estaciones de transporte con citatorios para comparecer ante tribunales de inmigración en fechas posteriores, muchas veces en otros estados.
Para los albergues, la crisis aumentó por la reducción de fondos del gobierno y la práctica habitual de la CBP de redirigirlos a los migrantes de Texas y Arizona, para que lo procesen en San Diego.
En las estaciones de transporte, grupos de voluntarios se organizan para traducir indicaciones a los migrantes. Pero las organizaciones activistas denuncian que los esfuerzos son insuficientes ante el flujo de personas.
Este mes, el condado aprobó fondos para facilitar transporte al aeropuerto, internet y comida a los migrantes que llegan a las estaciones.
Con información de 2001.