Venezuela logró un empate valioso 1-1 contra Brasil en el Estadio Monumental de Maturín, en la fecha 11 de las Eliminatorias al Mundial 2026, en un partido que tuvo un final controversial cuando el sistema de riego del campo se encendió en pleno ataque de la “canarinha” en los últimos minutos.
El encuentro no fue nada fácil para el equipo del “Bocha” Batista, que comenzó el partido en desventaja tras un gol de Brasil, a pesar de la oportunidad desaprovechada que tuvo Vinícius Jr. para emparejar el marcador desde el punto penal.
La situación se complicó aún más para la Vinotinto cuando Alexander González fue expulsado, dejando a la selección nacional con un jugador menos.
En una de las jugadas más curiosas del encuentro, cuando Brasil buscaba desesperadamente la victoria, los aspersores del campo de juego se activaron a falta de tres minutos para el final del partido.
El hecho sorprendió a los jugadores brasileños, que rápidamente protestaron ante el árbitro, acusando al staff Venezuela de intentar hacer tiempo.
En medio de la confusión, algunos jugadores de la “verdeamarelha” intentaron incluso apagar los aspersores, mientras otros, como Vinícius y Raphinha, se dirigieron al cuarto árbitro en señal de protesta.
El incidente de los aspersores, aunque involuntario o no, contribuyó a dilatar el tiempo de juego y permitió a Venezuela sostener el empate hasta el pitido final.
El árbitro, en respuesta a las quejas y al retraso, añadió más tiempo al encuentro, que culminó a los 90 minutos más nueve minutos de descuento.
Con este empate, Venezuela sumó un valioso punto que la mantiene en la pelea por un lugar en el próximo Mundial. El próximo reto para la selección venezolana será enfrentar a Chile en el Estadio Nacional de Santiago el martes 19 de noviembre, mientras que Brasil se medirá ante Uruguay en el Estadio Arena Fonte Nova de Salvador de Bahía el mismo día.
Con información de Versión Final
