Este jueves 16 de noviembre, miles de fanáticos se dieron cita al último juego del año que disputará la Selección Nacional de Fútbol, desde Venezuela, específicamente en la ciudad de Maturín, donde La Vinotinto ha tenido una buena racha y se mantiene invicta en las Eliminatorias Sudamericanas 2026.
Hasta el momento se desconoce la cantidad exacta de fanáticos que se congregaron para vivir la emocionante y vibrante experiencia de La Vinotinto. Desde las 12:00 del mediodía, los fanáticos comenzaron a llegar en los alrededores del estadio Monumental, donde estaba pautado abrir el acceso a esa hora del mediodía, luego fue reprogramado para la 1:00 de la tarde.
La lluvia fue no fue impedimento para que las personas se movilizaran y cuando abrieron el acceso, sin problemas comenzaron a pasar a las instalaciones.
Cerca perimetral cede
Casi a las 5:00 de la tarde, ocurrió un evento inesperado, la cerca perimetral del estadio cedió y la multitud accedió sin ningún control, lo que formó una estampida humana dentro de las canales de acceso a las tribunas.
En los videos difundios en las redes sociales, se muestra el momento cuándo la cerca cede, y la multitud ingresó en total desorden, algo inesperado para los encargados de seguridad, quienes perdieron el control de la situación.
Fanáticos con entradas quedaron por fuera
Dentro del estadio, debido a la cantidad de personas que accedió al mismo tiempo se vivió un «horror». La estampida humana pasó todos los accesos sin el control debido. Muchos fanáticos que no tenían entradas ingresaron y otros que tenían las entradas al ver la situación desistieron de entrar.
Pelea en la zona Norte
Dentro del estadio en el área Norte, donde estaban las barras, ocurrió una pelea la cual, afortunadamente, fue controlada.
Hasta los momentos, las autoridades locales no han dado un balance de la situación que muchos comentan y corre como pólvora por las redes sociales.
No hubo retorno
Las personas que al salir del estadio esperaban tomar las unidades habilitadas y anunciadas para el traslado, reportaron que nunca llegaron.
«Nos preguntábamos por las unidades y caminábamos desorientados ¿dónde estarían? y nunca llegaron. Las que estaban salvaron a muchos cobrando 15 bolívares para la Zona Industrial hasta Los Iraníes», comentó un fanático.
Debido a esto muchas personas se vieron obligadas a caminar hasta el semáforo de Las Cayenas, para buscar taxis, mototaxis o busetas para retornar a sus hogares.
