Padres y representantes piden a la Zona Educativa darles soluciones
Sin pupitres, con el techo dañado, sin agua y el beneficio de la comida a medias, se encuentra funcionando la escuela Luisa Jiménez Canelón de Viboral en Maturín, así lo denunciaron padres y representantes de los más de 400 niños y niñas que estudian en el lugar.
Ramona Fuentes, representante de dos niños que estudian en la escuela, expresa que la hora de ingreso al lugar es a las 7:30 de la mañana, pero los menores llegan a las seis para poder contar con pupitres en el día, de lo contrario deben recibir las enseñanzas desde el suelo.
La representante añade que el techo se encuentra deteriorado y cuando llueve el agua humedece el interior, provocando la suspensión de clases.
Es importante señalar, que al intentar constatar la información el Director de la institución, informó que no estaba permitido el acceso porque «allí no había fallas», situación que generó malestar entre los representantes quienes desde la parte de afuera señalaron que no le conviene que se sepan los problemas, porque él es uno de los causantes al no gestionar ayuda.
Por su parte, Roxalí Fuentes, otra de las denunciantes dijo que el agua no llega a la institución, razón por la cual los baños se encuentran en mal estado y no está permitido su uso por los estudiantes.
Los afectados esperan que la Zona Educativa tome cartas en el asunto para solucionar las fallas existentes.
