En una carrera contra el tiempo y las bajas temperaturas, los organismos de emergencia del condado de Volusia, Florida, lograron rescatar a un niño de seis años con autismo que se encontraba atrapado en un estanque.
El menor, identificado cariñosamente como «Coco», había desaparecido de su residencia en la localidad de Deltona durante las celebraciones de Navidad.
Operativo aéreo y rescate térmico
Tras el reporte de desaparición interpuesto por su familia, la Oficina del Sheriff activó un despliegue de búsqueda inmediata. Cerca de las 18:30 horas, la unidad aérea Air One localizó al pequeño mediante cámaras térmicas en un estanque cercano a Conyers Court.
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Al momento del hallazgo, Coco se encontraba con el agua a la altura del pecho. Desde el helicóptero, los agentes coordinaron el rescate terrestre: «Dirígete directamente hacia el norte y te encontrarás con él», instruyó el equipo aéreo a las unidades en tierra.
El video difundido por las autoridades muestra el emotivo momento en que un oficial alcanza al niño. «El agua está muy fría y él está temblando. ¡Hola, amigo! ¡Hola, amigo!», exclamó el policía mientras lo ponía a salvo fuera del agua.
Atención médica
A pesar de la exposición al frío extremo, Coco recibió atención médica de emergencia y pudo regresar a su hogar esa misma noche. Sin embargo, este incidente no es un hecho aislado. En agosto de 2024, el pequeño ya había protagonizado un suceso similar al ser encontrado aferrado a una rama en otro estanque de la zona.
Este comportamiento, conocido como «elopement» o fuga, es común en algunos niños con trastorno del espectro autista (TEA), quienes a menudo se sienten atraídos por cuerpos de agua, lo que eleva significativamente el riesgo de ahogamiento.
Medidas de seguridad extremas
A pesar de que la familia ha implementado rigurosos protocolos de seguridad que incluyen:
- Instalación de cercas perimetrales.
- Activación de alarmas en puertas y ventanas.
- Uso de dispositivos de rastreo GPS.
La curiosidad y la falta de percepción del peligro permitieron que Coco burlara los controles una vez más.
Las autoridades locales han instado a la comunidad y a las familias con condiciones similares a extremar las precauciones, recordando que los dispositivos tecnológicos son una ayuda, pero la supervisión constante sigue siendo la barrera principal.
Con información de Caraota digital
