Dony José Berter Torres, de 18 años de edad, falleció tras ser arrollado por un joven que conducía su moto “en caballito”, en el sector Beta Gamma, en Filas de Mariches. La víctima regresaba a su casa a bordo de su motocicleta a las 4:00 a. m. el domingo 15 de septiembre.
Por el accidente sufrió fractura craneoencefálica severa y hemorragia interna. Fue trasladado hasta el hospital Domingo Luciani en El Llanito por vecinos que presenciaron el accidente. Familiares contaron que la persona que lo arrolló huyó del sitio. Vecinos aseguraron que nadie lo vio antes por la zona.
Para Lilian Romero, directora de Asotránsito, la realización de maniobras en las calles puede “incrementar los accidentes de tránsito en jóvenes motorizados” de una edad comprendida entre los 16 y 24 años de edad.
La experta en seguridad vial recordó que en Venezuela no existen muchos lugares establecidos para hacer “motopiruetas”, una práctica ejecutada por motorizados –principalmente en vías públicas del país, que incluye avenidas, calles e incluso autopistas– y que Nicolás Maduro decretó como deporte nacional el 8 de junio.
El mandatario también solicitó que se creara una ley para regular la disciplina. Sin embargo, tres meses después del anuncio no existe ninguna normativa para las “motopiruetas” pese a que Alexander “Mimou” Vargas, alto comisionado presidencial por la vida y presidente de la Fundación Movimiento por la Paz y la Vida, informó que para finales de junio presentarían un proyecto de ley en la Asamblea Nacional.
“La Ley de Transporte Terrestre y la ley de convivencia establecen que no se pueden hacer piruetas ni motopiruetas en ninguna avenida de Venezuela, al menos que sea un espacio señalizado para ello (…) no puede haber tránsito de personas, las únicas que pueden estar en el sitio son espectadores o instructores, pero no lo pueden hacer en ninguna vía rural, ni extraurbana, ni en autopista, porque vulnera la seguridad de los que compartimos esa vialidad”, dijo Romero.
LA LEY DE TRANSPORTE TERRESTRE EN SU ARTÍCULO 169, NUMERAL 10, ESTABLECE COMO “SANCIÓN GRAVE” “CONDUCIR VEHÍCULOS REALIZANDO MANIOBRAS PROHIBIDAS POR EL REGLAMENTO DE LA LEY, O POR AUTORIDADES COMPETENTES EN LAS VÍAS DE CIRCULACIÓN”, QUE INCLUYE SANCIONES O MULTAS DE 10 UNIDADES TRIBUTARIAS.
“Venezuela no está preparada”
A juicio de Romero, Venezuela “no está preparada” para tener un deporte extremo como las “motopiruetas”. Insiste en que la educación vial, la organización, el control y la responsabilidad son clave para ejecutar actividades de este tipo en el país.
“LA MAYORÍA DE ESTOS MUCHACHOS NO TIENEN IDEA DE LO QUE SON LAS SEÑALES DE TRÁNSITO. SI YO LES PREGUNTO A TODOS LOS MOTOPIRUETAS O MOTORIZADOS EN VENEZUELA POR LAS SEÑALES DE TRÁNSITO ES PROBABLE QUE NO LAS CONOZCAN NI CUÁL ES EL LÍMITE DE VELOCIDAD (…) ENTONCES LA EDUCACIÓN VIAL TIENE QUE SER PRIORIDAD EN ESTO ANTES DE DECIR QUE UN MUCHACHO ES DEPORTISTA”, DIJO LA DIRECTORA DE ASOTRÁNSITO.
Romero mencionó que quien practique motopiruetas debe tener los equipos necesarios de seguridad. Esto incluye cascos especiales de fibra de carbono, que pueden costar hasta $300, y motos resistentes y seguras para realizar ese tipo de maniobras.
Además, enfatizó en que es importante que estas personas cuenten con un seguro médico en caso de fracturas por caídas en el pavimento, quemaduras o cualquier tipo de lesión.
“EL CUERPO HUMANO NO ESTÁ CAPACITADO PARA AGUANTAR UN IMPACTO A 30KM/H. LA PERSONA DEBE CONOCER BIEN SU VEHÍCULO, LAS SEÑALES DE TRÁNSITO Y TENER UN COMPORTAMIENTO RESPONSABLE, PARA ESO ES QUE SE HACE DEPORTE”.
Vía El Aragueño.