Una nueva visión futurista se tiene para la “ciudad distinta”, sin embargo, en los sectores la realidad es otra, con una amplia brecha
A 262 años de su fundación, Maturín va hoy encaminada a una nueva visión de ciudad futurista, tras los avances urbanos que ha asumido la nueva gerencia municipal.
En la ciudad se pueden observar plazas rehabilitadas con excéntricos adornos navideños que dan un aire a ciudad del primer mundo, paradas de transporte público inteligentes, reparación de los semáforos, algunas calles pintadas y asfaltadas, iluminación en sus principales avenidas, etc.
Sin embargo, al adentrarse por los sectores y comunidades, es otra la realidad la que se percibe, generando un contrarse con una amplia brecha, pues, en ellos se pueden observar calles de tierra, cloacas desbordadas, falta de alumbrado público, basura por todas partes, entre otras carencias.
Con el lema ‘una ciudad distinta’ se ha dado a conocer a Maturín desde hace muchos años, que según sus habitantes, se debe al verdor de sus espacios, calles asfaltadas, la limpieza, la organización y la amabilidad de su gente, además de tener un buen drenaje.
Esto lo confirma el señor Ramón Guzmán, quien asegura que también era una ciudad muy tranquila.
Guzmán ve imperativo la importancia de avanzar en el tiempo, por lo que asegura que «estamos preparados en un 70 % para los nuevos cambios implementados por la Alcaldía, aunque es necesario realizar algunos ajustes porque las personas necesitan culturizarse más», acotó.
Por su parte, la señora Milagros Rojas, aseguró que la ciudad está muy hermosa, pero cree que «la prioridad es el hospital y la educación, ya que están muy descuidados», recalcó.
A su vez, Angélica Alexander, expresó que no todos los ciudadanos están preparados para avanzar, al referirse al cuidado de los espacios rehabilitados, ya que quienes dañan estas áreas son el colectivo común.
