Despertarse en medio de la noche y no poder volver a dormir puede ser frustrante, pero existen estrategias simples y efectivas para ayudarte a conciliar nuevamente el sueño. La clave está en mantener la calma y crear un entorno propicio para el descanso.
Evita mirar el reloj
Cuando te desvelas, mirar el reloj puede aumentar el estrés al calcular las horas de sueño perdidas. Esto activa tu mente y dificulta que te relajes. En lugar de preocuparte por la hora, intenta centrarte en pensamientos tranquilos.
Practica la respiración profunda
La respiración lenta y profunda ayuda a reducir la actividad del sistema nervioso. Inhala por la nariz durante cuatro segundos, mantén el aire cuatro segundos más y exhala lentamente por la boca durante seis segundos. Repite este ciclo varias veces hasta que sientas que tu cuerpo se relaja.
Usa una técnica de relajación mental
El “escaneo corporal” es una técnica efectiva. Cierra los ojos y concéntrate en relajar cada parte de tu cuerpo, comenzando por los dedos de los pies y avanzando hacia la cabeza. Imagina cómo cada músculo se suelta y se relaja.
Levántate brevemente si es necesario
Si después de 20 minutos no puedes dormirte, levántate de la cama y realiza una actividad tranquila, como leer un libro (preferiblemente en formato físico y con luz tenue) o escuchar música relajante. Evita dispositivos electrónicos, ya que su luz azul puede interferir con la producción de melatonina, la hormona del sueño.
Mantén un entorno cómodo
Asegúrate de que tu habitación sea oscura, silenciosa y tenga una temperatura adecuada. Si el ruido externo es un problema, considera usar tapones para los oídos o una máquina de sonido blanco.
Volver a dormirte es posible si enfocas tu energía en calmar tu mente y cuerpo.
Vía Agencias.
