Para la llegada del Nuevo Año, los monaguenses se alistan con los ingredientes necesarios para preparar una de las tradiciones más esperadas: el sancocho del 1° de enero.
Este famoso sancocho, reúne a familiares y amigos alrededor de la mesa, se ha convertido en un símbolo de unión y celebración en la región, para muchas familias, esta tradición es una forma de dar la bienvenida al año nuevo con todo el ánimo.
“Desde hace años, en mi casa hacemos sancocho el 1° de enero. Es un momento para reunirnos, recordar a los que ya no están y celebrar juntos, es una tradición que se pasa de generación en generación”, expresó María González, ciudadana.
“Lo más bonito del sancocho es que cada familia tiene su propia receta y su propio estilo, eso hace que cada año sea especial y único”, comentó Pedro Rivas, un joven monaguense entusiasta que espera con ansias la llegada del nuevo año.
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Por otra parte, los mercados locales están viendo un aumento en la demanda de ingredientes frescos, ya que los monaguenses buscan asegurarse de tener todo lo necesario para preparar el sancocho. Huesos de res, costillas, lagarto o rabo, plátanos, yuca, auyama y condimentos, son solo algunos de los elementos esenciales que no pueden faltar en esta receta familiar.
Así, los monaguenses se preparan para recibir el 2026 con el corazón lleno de esperanza, listo para disfrutar de uno de los platos más emblemáticos de su cultura.
Foto: Juan Carlos Goitia
