Tanto el embajador peruano ante Naciones Unidas como el del órgano americano dimitieron, luego de que el presidente Pedro Castillo disolviera el Congreso
Esta tarde se conoció la renuncia del embajador peruano ante la ONU, Manuel Rodríguez Cuadros, así como del representante inca ante la OEA (basado en Washington), Harold Forsyth, luego de que el presidente Pedro Castillo decretara la disolución del Congreso.
Rodríguez Cuadros presentó este miércoles su «renuncia irrevocable» ante lo que llamó «el golpe de Estado producido en Perú», reseñó Efe.
En su cuenta de Twitter, Rodríguez Cuadros, hizo pública una carta de renuncia enviada a su superior, el canciller César Landa, quien también ha dimitido y denunciado el golpe de Estado.
«Esta situación -en Perú- infringe la constitución del Estado y las obligaciones internacionales del país contenidas en la Carta Democrática Interamericana», reza la carta.
Por su parte, Forsyth renunció hoy a su cargo «por razones morales y profesionales».
Con información de El Universal