
La abuela de una niña de tres años recluida en la emergencia pediátrica del Hospital Universitario «Dr. Manuel Núñez Tovar», de Maturín, solicita ayuda económica para realizarle un examen gastrointestinal debido a que la infante ingirió un producto químico destapador de cañerías, accidentalmente.
«La madre fue a buscar una toalla y cuando regresó, la niña ya tenía la tapa en la boca. En el desespero, la mamá me llamó y nos dirigimos al hospital», explicó.
La abuela afirmó que, se llevaron detenida a la madre y al padre de la niña, dejando a la abuela sola con su nieta sin saber cómo comprar los medicamentos necesarios.

Destacó que son una familia de bajos recursos y no tienen suficiente dinero para realizar los exámenes pedidos por los médicos.
«Me están pidiendo una videogastroscopia que cuesta alrededor de 300 dólares, pero nos dicen que pueden hacerla por 280 dólares, sin embargo, ¿de dónde vamos a sacar ese dinero? Lo necesitamos urgente porque la niña requiere ese estudio», expresó.
También mencionó que el padre de la niña, quien asegura que estaba trabajando, fue llevado preso y es quien podría ayudar a conseguir el dinero para el examen. «No tengo a quien decirle, por eso pido ayuda al gobernador Ernesto Luna y a la alcaldesa de Maturín, Ana Fuentes, para poder reunir ese monto», agregó.
La abuela mencionó que tuvieron que recurrir a un centro de salud privado para realizar un estudio de rayos X, ya que en el Humnt este servicio no está activo.
Fotos/Juan Goitía