Hacer deporte siempre es bueno, pero si lo que quieres es quemar grasa y perder peso es mejor que realices la actividad física a determinadas horas en las que aumenta el metabolismo de las grasas, según sugiere un nuevo estudio que ha encontrado que los ratones que se ejercitaron en una etapa temprana –que en el caso de los humanos se corresponde con el ejercicio matutino– incrementaron más su metabolismo que aquellos que hicieron ejercicio en un momento en el que normalmente deberían descansar.
La forma en la que la actividad física afecta al organismo varía en los diferentes momentos del día porque los procesos biológicos están vinculados a los ritmos circadianos de las células. Un equipo de investigadores del Karolinska Institutet (Suecia) y la Universidad de Copenhague (Dinamarca) estudiaron en ratones cómo afecta la hora del día en la que se practica ejercicio a la quema de grasa.
Estos científicos analizaron el tejido adiposo de estos animales tras una sesión de ejercicio de alta intensidad realizada en dos momentos de la jornada: una fase activa temprana y una fase de descanso temprana (que se correspondían con una sesión al final de la mañana y al final de la tarde, respectivamente, en las personas). En concreto, estudiaron varios marcadores del metabolismo de las grasas y analizaron qué genes estaban activos en el tejido adiposo después del ejercicio.
Ejercicio para estimular el metabolismo en personas con sobrepeso
Los investigadores comprobaron que la práctica de actividad física en una fase activa temprana incrementaba la expresión de genes que intervenían en la descomposición del tejido adiposo, la termogénesis (producción de calor) y las mitocondrias en el tejido adiposo, lo que indica una tasa metabólica más elevada. Estos efectos únicamente se observaron en los animales que realizaron ejercicio en la fase activa temprana y fueron independientes de su consumo de alimentos.
«Nuestros resultados sugieren que el ejercicio al final de la mañana podría ser más efectivo que el ejercicio al final de la noche para promover el metabolismo y la quema de grasa y, si es así, podría resultar útil para las personas con sobrepeso», ha señalado Juleen R. Zierath profesora del Departamento de Medicina y Cirugía Molecular y del Departamento de Fisiología y Farmacología en el Karolinska Institutet.
Los ratones comparten muchas funciones fisiológicas básicas con los seres humanos, y son un modelo muy bien constituido para la fisiología y el metabolismo humanos, pero hay que tener en cuenta ciertas diferencias clave como, por ejemplo, que se trata de animales nocturnos.
«El momento adecuado parece ser importante para el equilibrio energético del cuerpo y para mejorar los beneficios del ejercicio para la salud, pero se necesitan más estudios para extraer conclusiones fiables sobre la relevancia de nuestros hallazgos para los humanos», concluye la profesora Zierath. Los resultados del estudio se han publicado en la revista PNAS.
Con información de 800Noticias.