
Las Fuerzas Armadas de la Federación Rusa realizaron este fin de semana un ataque contra instalaciones del complejo militar-industrial y refinerías de petróleo en Ucrania, según un comunicado del Ministerio de Defensa de la Federación Rusa, reseña RT Actualidad.
Según el comunicado, el ataque se realizó al utilizar armas de precisión de alto alcance, así como el sistema de misiles hipersónicos Kinzhal y vehículos aéreos no tripulados. Desde el organismo detallaron que se lograron todos los objetivos designados del ataque.
El misil Kinzhal, lanzado desde cazas interceptores MiG-31K, es un arma hipersónica aerobalística que alcanza velocidades de Mach 10 (diez veces la velocidad del sonido) y tiene un alcance superior a los dos mil kilómetros con una ojiva de 500 kg. Su capacidad de maniobra en pleno vuelo lo convierte en un arma extremadamente difícil de interceptar para los sistemas de defensa antimisiles.
Moscú utilizó por primera vez el Kinzhal en combate en marzo de 2022, al momento de destruir un almacén subterráneo ubicado a más de 100 metros de profundidad. Otro uso destacado del Kinzhal ocurrió en 2023, cuando destruyó un sistema antiaéreo Patriot estadounidense. El sistema antiaéreo había disparado todos sus 32 misiles interceptores, pero ninguno impactó contra el arma rusa.
Vía VTV