
Este Viernes Santo, la mayoría de los locales ubicados en el centro de la ciudad de Maturín no abrieron sus puertas y los pocos que subieron sus santamarías lo hicieron hasta el mediodía.
Karina Lee, dueña de una tienda, expresó que hubo poca afluencia durante el día y muy bajas ventas, en comparación con el Jueves Santo, que hubo más movimiento de compradores. «La mayoría de los negocios están cerrados y los pocos que abrimos trabajaremos hasta temprano. Este sábado sí estaremos abiertos en horario normal», afirmó.
Asimismo, Josué Balboa, mencionó que a las 12:00 del mediodía cerraría su negocio para que así sus empleados puedan disfrutar con su familiares y descansar, ya que el Jueves Santo trabajaron en su horario habitual.

