Más de 1.4 millones de personas se vieron obligadas a abandonar sus hogares en Filipinas tras el paso del tifón Fung-wong, que provocó la muerte de ocho personas, así como inundaciones, deslizamientos de tierra y cortes masivos de electricidad en varias provincias del norte del país.
Al menos ocho personas perdieron la vida debido a la tormenta, mientras las autoridades habilitaron refugios de emergencia para los desplazados. Se espera que el fenómeno se dirija hacia el noroeste, con rumbo a Taiwán.
Los fuertes vientos y lluvias intensas inundaron 132 aldeas y provocaron daños en unas 1.000 viviendas. En algunas zonas, los habitantes quedaron atrapados y tuvieron que refugiarse en los techos mientras el agua subía rápidamente.
De acuerdo con la Oficina de Defensa Civil, Fung-wong impactó en la provincia nororiental de Aurora con categoría de supertifón, con vientos sostenidos de hasta 185 km/h y ráfagas de 230 km/h.
La tormenta, que se extendía por 1.800 kilómetros, perdió fuerza al atravesar las zonas montañosas del norte y las planicies agrícolas antes de dirigirse al Mar de China Meridional. Entre las víctimas, una persona murió ahogada en Catanduanes y otra perdió la vida en Catbalogan cuando su casa colapsó.
Bernardo Rafaelito Alejandro IV, de la Oficina de Defensa Civil, indicó que las carreteras bloqueadas por deslizamientos se despejarán a medida que mejoren las condiciones climáticas, y que continúan las operaciones de rescate y asistencia.
El presidente filipino, Ferdinand Marcos Jr., declaró el estado de emergencia ante la magnitud de los daños provocados por Fung-wong y el tifón Kalmaegi, que semanas atrás dejó al menos 224 muertos antes de impactar Vietnam.
Como medida, más de 325 vuelos nacionales y 61 internacionales fueron cancelados, mientras que miles de personas quedaron varadas en puertos por la prohibición de la navegación en alta mar.
Filipinas, uno de los países más vulnerables a desastres naturales del mundo, enfrenta cada año cerca de 20 tifones y tormentas, además de terremotos y erupciones de volcanes activos.
Vía Nota de Prensa