El Chelsea firmó una actuación espectacular para imponerse por 3-0 al París Saint-Germain en la final de la Copa del Mundial de Clubes disputada este domingo, pero a la ceremonia de entrega de premios posterior acudió un invitado inesperado: el presidente de Estados Unidos.
Fue una tarde perfecta de fútbol para el conjunto del Chelsea FC: el club londinense puso fin abruptamente al dominio del vigente campeón de la Liga de Campeones, el París Saint-Germain, con una actuación brillante.
3-0
Tras 90 minutos en el estadio Met Life de Nueva Jersey, el marcador era de 3-0 y todo estaba listo para una exuberante celebración del título. Pero entonces apareció de repente en el escenario un invitado a la fiesta no precisamente desconocido: el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
El republicano había presenciado el partido desde las gradas, tras lo cual entregó las medallas a los ganadores y al equipo perdedor de París. Sin embargo, parecía que a Trump aún le quedaba un hueco para colarse en el meollo de la ceremonia de entrega de medallas a las estrellas del Chelsea, ante la sorpresa de los jugadores.
Aunque el presidente estadounidense parecía estar visiblemente a gusto, su visita provocó reacciones bastante encontradas. A algunos jugadores no pareció molestarles su presencia mientras que otros, como la estrella Cole Palmer, se mostraron claramente confusos por la visita de Trump al palco.
Trump ya había hecho repetidas apariciones durante el torneo. En junio, recibió al equipo de la Juventus de Turín en el Despacho Oval, pero prefirió desviar la conversación hacia temas políticos cuando le hicieron preguntas los periodistas presentes. Quería saber si una mujer también podía jugar en el equipo ‘bianconero’. Sin embargo, los deportistas se contuvieron en sus declaraciones políticas.
Gianni Infantino, jefe de la FIFA y amigo personal del presidente de Estados Unidos, quien también pareció alegrarse de su visita al palco de los vencedores. En el pasado, el suizo ha expresado repetidamente en público su afecto por Trump. Pero el jefe de la FIFA no solamente mantiene buenas relaciones con Trump. El presidente ruso, Vladímir Putin, también tuvo un gran escenario en la Copa Mundial de la FIFA 2018 en su país. El emir de Catar, por su parte, hizo su aparición en el Mundial de 2022 en Oriente Medio.
La visita sorpresa del presidente, por otra parte, podría haber sido su debut en el gran escenario del fútbol. Con vistas al Mundial del año que viene en Estados Unidos, Canadá y México, es de esperar que Trump busque protagonismo, y que Infantino le invite a él.
Vía EuroNews
