Varias alcantarillas representan un peligro para las familias que acuden al lugar
Transeúntes de Paseo Bolívar de Maturín temen caer en los huecos que se encuentran en las aceras, a causa de trabajos sin culminar o carencia de las tapas de las bocas de visitas, aseguran que a pesar de los llamados a las autoridades e incluso a los mismos comerciantes, no se han reparado las fallas.
Uno de los problemas más evidente se observa iniciando el paseo, diagonal a la escuela Vicente Salías, allí una alcantarilla a la cual se le realizaba trabajos, quedó a medias y entre basura y cabillas dobladas representa un gran peligro, para quienes por descuidos caigan en él.
Daniel Calzadilla, uno de los entrevistados dijo, que los comercios asiáticos que hacen vida en ese espacio también deberían de desarrollar una labor social y tapar ese hueco que afecta a sus compradores.
Justo al frente, en la esquina de la Casa del Historiador, el desborde de aguas servidas provocó el hundimiento de la alcantarilla y está quedó descubierta, el hedor y malestar es notable en quienes pasan por ese sitio.
A pocos metros a la altura del Liceo Miguel José Sanz, otra alcantarilla sin tapa ha sorprendido a los conductores, quienes confiados por ser un sitio ícono de Maturín, no se imaginan que pudieran caer y dañar sus vehículos o peor aún sufrir lesiones.
Los afectados, esperan que se adelante un plan de reparación de alcantarillas en los próximos días por parte de las autoridades locales.