
Habitantes del sector Fundemos, en Maturín, han vuelto a reportar deficiencias en el servicio de agua a través de las tuberías. Esta vez, los vecinos de la avenida Quiriquire indican que no han contado con el suministro desde el pasado sábado.
“Nos vemos obligados a comprar agua, ya que no puedo cargar peso. Adquirimos el agua de los camiones cisterna para bañarnos, lavar y limpiar, y para beber, tenemos que ir a diferentes lugares donde el costo varía: en algunos sitios cuesta 100 bolívares y en otros solo 20”, comentó Flor Enríquez.



Flor señala que los camiones cisterna del municipio no han visitado la comunidad en tres semanas, lo que ha llevado a algunos vecinos a cargar agua desde un comercio asiático en la zona.
La señora también menciona que el problema del agua ha persistido durante años en la comunidad, pero destaca que hace más de 20 años el servicio era constante, sin embargo, la situación comenzó a deteriorarse, hasta llegar al punto en que pasan períodos prolongados sin recibir el suministro.
“Llevo 43 años aquí, y antes el agua llegaba de manera permanente, tanto de día como de noche. Luego, empezamos a notar que cada febrero no había agua, y la situación se ha agravado desde entonces”.



Además, afirma que cuando el gobernador Ernesto Luna prometió solucionar las fallas en el servicio, efectivamente hubo mejoras y el suministro se regularizó, Sin embargo, la situación ha vuelto a complicarse desde que iniciaron los trabajos en Toro Gordo.
Fotos/Juan Goitía